Lotería de Navidad

Como es tradición por este blog y ya que seguramente os estén abrasando a lotería en cada lugar que visitéis y en el trabajo, facultades, colegios, bares... y que claro estaréis comprando de todos los sitios posibles por la receta mágica del "compra que como toque y tú no lleves..." o "pues verás como toque..." o el eslogan por excelencia del sorteo "¿Y si cae aquí?"; como es tradición os voy a dar una serie de recetas para que aumenten las probabilidades de que os toque la lotería el día 22 o cualquier otro sorteo de azar que queráis echar.

Lo primero que se debe hacer para aumentar la probabilidad es hacer un estudio sobre qué número ha salido más veces en todos los sorteos de esa índole en toda la historia, si de 200 sorteos ha salido el 18 más veces lo más probable es que salga el 18 también este año. Otra cosa que aumenta la probabilidad de que un décimo toque además de manera exponencial es comprarlo fuera de la provincia donde uno vive: que vas a Segovia pues compra, que vas a Cuenca pues compra... cuanto más lejos más fácil es que toque. Además también suele funcionar comprar décimos en lugares donde han ocurrido desgracias, esos lugares tienen una magia especial que atrae la suerte y hace que los décimos sean agraciados.

Comprar en administraciones donde tradicionalmente suelen dar premios también funciona como por ejemplo en Sort o en Doña Manolita en Madrid, es magia y no que entre esas cuatro o cinco administraciones vendan el 90% de la lotería que se pone en circulación y que necesariamente tienen que dar un número, que no tiene por qué ser el tuyo, que tenga premio gordo. También tened en cuenta que los números bajos o "feos" tienen el efecto contrario sobre el premio, es decir, es más difícil que toquen por sus características especiales que todos sabemos y que no voy a explicar aquí.

También es más fácil que te haga rico soñarte con un número, porque de todos es sabido la capacidad de adivinación que tienen los sueños... que son los mismos que hacen que vueles, que te líes con esa tía buena de la tele, que seas un supercachas. De todos es sabido la capacidad de adivinación que tienen los sueños.

Por último las cosas que más suelen dar resultados monetarios es comprar un décimo, apuntar el número y romperlo o perderlo: basta que lo rompas para que casi todas las bolas del bombo se conviertan en ese número, también sirve que toda la gente de tu entorno compre un décimo y tú no: lo más probable es que resulte premiado y todos estén celebrando mientras a ti se te queda la cara de tonto. Por eso es aconsejable adquirir de cualquier número que compren personas de tu alrededor no para que te toque sino para que a ellos no les toque y a ti no se te quede la cara de gili en la tele mientras ellos salen celebrando, porque lo importante es que si a ti no te toca a ellos tampoco. Además si compras un número y lo cambias con otra persona, casi seguro que el que le has dado tú toque y el que te han dado con el cambio no y también se te quede la cara de tonto.

No sé si habéis notado la ironía con la que he escrito el post donde se destapan muchas, no todas, de las tonterías que tiene la gente en la cabeza y con la que se engañan las personas a si mismas para gastar ingentes cantidades de dinero en lotería de cualquier tipo... gran parte de esa gente es la misma que se queja de la cantidad de impuestos que nos cobra el gobierno cuando están pagando voluntariamente con los sorteos. Siempre hay alguien que dirá: es que a alguna persona le tiene que tocar. Efectivamente a alguien le toca pero la probabilidad de que sea a ti a quien le toque es ínfima... es que la gente que sale en la tele celebrando mira cómo les ha tocado, sí claro que sí pero si a la gente que no les toca saliera en la tele celebrando os aseguro que nadie compraría lotería lo que pasa es que la gente que tiene premio arma más escándalo, obviamente, que la que no y por eso parece que es casi seguro que te pueda tocar. Por lo demás, la probabilidad de que salga cualquier número es la misma que de la que salga cualquier otro ya sea alto, bajo, feo (nunca entenderé qué es un número feo o bonito), el mismo del año pasado, uno que no ha salido nunca, si lo llevan los demás, si no lo llevan, si lo compras debajo de tu casa, si lo compras en Coruña... Todos la misma y es casi cero.

Todo esto viene a cuento porque leí el otro día en Microsiervos un post llamado "La gente es reacia a intercambiar lotería" que podéis leer aquí y que es bastante interesante y que además enlaza al post original, en inglés de otra página que resume el artículo original de unos señores que han hecho un estudio psicológico sobre el tema. Muy interesante y os recomiendo leerlo, a mi como matemático me da mucha risa este tipo de comportamiento psicótico que tiene la gente con la lotería ya que si por un momento tuvieran una mínima idea de probabilidad se darían cuenta de cómo están tirando el dinero a la papelera de al lado de la mesa. ¡Que la suerte os acompañe!